Dejando atrás la carretera, nos adentraremos suavemente en Aralar. Es un paseo inigualable, sin apenas desnivel, el mismo que antaño recorría una vagoneta tirada por animales... Un gran hayedo, un sendero agradable, el río, el barranco y alguna carbonera, son los elementos que iremos viendo antes de llegar al magnífico entorno que nos ofrece el embalse de Lareo.
En el puerto de Lizarrusti se emplaza el Centro de Interpretación del Parque Natural de Aralar, rodeado de un impresionante bosque de hayas. Frontera entre Gipuzkoa y Navarra, se trata de un punto tradicional de enlace entre ambas tierras, también es una entrada al Parque.
El macizo kárstico que conforma el parque natural tiene una superficie de 10.971 ha. Predominan los pastos, que son pastos para ovejas, vacas y caballos; en sus laderas hay pronunciadas laderas dominadas por hayas. En las dehesas se han encontrado numerosos restos prehistóricos, antiguos y medievales. Las narraciones orales, creadas y desarrolladas de generación en generación, forman otra parte importante del patrimonio del Parque Natural de Aralar.